lunes, 5 de diciembre de 2011

En espera

-Perdóname,no supe bostezar a tiempo,tenía la sonrisa caducada,quizás podamos volver a empezar ¿no?.

-No creo que sea demasiado tarde, el reloj marca las una de la tarde,hasta las una y media,tenemos media hora para que cambies tu sonrisa.

-¿Pero como?,está caducada,¿lo recuerdas?,hay cosas que son imposibles de cambiar.

-Bueno,yo soy de los que piensan que nada es imposible,recuerda que as sido tu la que me has pedido volver a empezar. Si empezamos desde el principio no puede caducar,no le daremos ese privilegio,no llegará esa fecha.

-Son las una y dos minutos,¿qué hacemos con el tiempo?.

-Olvídate del tiempo,hasta y media que todo se acabe,tenemos tiempo para deshacerlo,para imaginarlo,para moldearlo y modelarlo a nuestro propio antojo.¿Juegas?.

-Está bien,pero no quiero perder.

-Tranquila,no lo sabremos a no ser que juguemos,esperemos que todo salga bien.¿Y cómo decías que era tu nombre?.

-Margarita,soy Margarita y tengo quince años voy camino a Valencia a ver a mis abuelos,les llevo comida típica de mi ciudad y unos jerseys de ganchillo que mi madre se ha encargado de hacer durante meses.

-Encantado Margarita,el mío es Alonso y tengo cincuenta y seis años, me destino es Gibraltar y voy por asunto de negocios, tengo muy mal carácter cuándo me sacan de la cama por la mañana,pero cuándo llega el café cambia todo.

-¿Te gusta el café?,vaya, es asqueroso en mi opinión.

-¿Asqueroso?,para nada,todo es empezar,cuándo necesites estar tantas horas despierto como tiene un día entero me lo cuentas,tienes que echar mano a líquidos como esos,son mano de santo sabes.¿Y bueno,cuál es tu mayor virtud?.

-Cantar,canto a todas horas,mi gato se asusta cuándo me escucha,pero creo que lo hago bien,ayer lo hice frente a mis tíos,fue el cumpleaños de uno de ellos.

_¿Y no los asustastes como al gato?.

-No para nada-sonrió.

-Stop.

-¿Cómo?.

-Si,stop,has sonreído,hemos vencido al tiempo y su caducidad,¿lo ves?,no era tan complicado sacarle una sonrisa a una chica como tú.

-Es cierto,mi madre me dijo que no hablara con extraños,solo fue eso,pero tampoco pasa nada.

-Tu tren sale en poco minutos,te aconsejo que salgas corriendo,pero no quites esa sonrisa,concíliate con el tiempo,así nunca caducará.

-Lo haré,haré de mi sonrisa,una sonrisa eterna.

-Pequeña,que sepas que has ganado esta partida,¿lo ves?,todo era jugar.

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